viernes, 23 de noviembre de 2012

CULTURA DE LOS AYOREOS
Ubicación :Los ayoreo, llamados en el Paraguay morotocós o moros, también conocidos como corazo o kursu, que se autodenominan ayoréiode, 'personas' (en otras dialectos ayoweo o ayoeo), son un pueblo indígena del Chaco Boreal que viven en la zona fronteriza entre el Paraguay y Bolivia. Hasta mediados del siglo XX ocupaban un territorio de 300.000 km2 delimitado por los ríos Paraguay, Pilcomayo, Parapetí y Grande. Los guaraníes los denominaron pyta jovai (“talón enfrente”) y los tapietés yanaigua y tsirágua
La economía ayoreo se basa en la caza de animales del monte chaqueño (chanchos del monte, armadillos, osos hormigueros, tortugas) y en la recolección (miel, frutas del monte, fibras vegetales y materias primas para la producción de objetos de uso). Estas actividades de sustento son complementadas por la pesca en los arroyos y las lagunas, y los cultivos en pequeños claros en el monte, ambos en las épocas de lluvia en verano. Leer más...
En la vida tradicional, existían numerosos sistemas y mecanismos de distribución que aseguraban la redistribución, al interior del grupo familiar y local, de todo lo que uno podía haber cazado, recolectado o cosechado. De esta manera participaban y se beneficiaban también aquellos miembros del grupo (ancianos, viudas, huérfanos, etc.) que por diversos motivos no podían ejercer ellos mismos una actividad materialmente productiva.
Estos mecanismos de distribución se mantienen aún hoy vigentes en la vida no tradicional y sedentaria, ya fuera del monte, y son aplicados también a los productos y las ganancias provenientes de las formas de producción de la vida moderna. La no- acumulación de bienes materiales que resulta – todo lo que "ingresa" se redistribuye de inmediato - le garantiza al pueblo Ayoreo hasta hoy un alto grado de movilidad personal y colectiva, y la vigencia natural de mecanismos de solidaridad que protegen a los más débiles.

En el tiempo de la vida tradicional antes del contacto, los Ayoreo estaban políticamente organizados en más de cincuenta grupos locales que se dividían el territorio de la etnia y que recorrían espacios extensos y propios. Cada grupo local gozaba de un grado muy elevado de autonomía política y con un liderazgo independiente, autónomo con relación a los demás grupos. Las relaciones entre muchos de estos grupos locales, igual que las relaciones con los otros pueblos indígenas y no- indígenas eran de guerra. De acuerdo a las necesidades y las circunstancias de una vida nómada en constante movimiento, los grupos locales podían dividirse en subgrupos, separarse temporariamente, y volver a unirse más tarde. No existía una jerarquización del liderazgo ni un liderazgo centralizado para toda la etnia. Coincidentemente, ni los territorios de los grupos locales, ni el territorio de la etnia en su totalidad, tenían centros geográficos.
Ni los grupos locales, ni sus territorios deben considerarse como permanentes. La historia ayoreo conoce como algo normal las divisiones que conducen a la desaparición de grupos y a la constitución de otros, nuevos, las uniones entre grupos diferentes y los cambios de nombre, todo con los consiguientes cambios y redefiniciones del territorio grupal.
Esta organización política comunica la idea de dinamismo, de movilidad social permanente, de la ausencia de un principio ordenador jerárquico y de principios centralizadores, y de una capacidad elevadísima de adaptación a las circunstancias de la vida.
La unidad de organización social y económica más importante era el "jogasüi", la familia extensa, que incluye además otras familias amigas.
Paralelamente a esta organización política descrita, la etnia estaba dividida en siete clanes. Los nombres del clan al que pertenece le dan hasta hoy el apellido a cada integrante de la etnia. Los miembros de cada uno de los siete clanes comparten un origen mitológico común y a una red de parentesco que incluye, para cada clan, una serie de animales, plantas, estados meteorológicos y fenómenos de la naturaleza en general, al igual que objetos de uso y artefactos humanos. El hecho de compartir la pertenencia clánica con todos los seres del mundo crea, para cada Ayoreo, una unión sentida de cercanía y solidaridad con los mismos. Todos los clanes en su conjunto incluyen así la totalidad de todo lo que existe, y todo lo que existe es a su vez pariente de los Ayoreo.
La estructura de relaciones clánicas coexiste y se superpone a la organización social de los grupos locales y se extiende como una red invisible a la etnia en su conjunto, preestableciendo relaciones de cercanía y apoyo mutuo incluso entre personas que nunca se encontraron físicamente pero que se reconocen como parientes (no sanguíneos) en el momento que se encuentren
Idioma:
El idioma ayoreo proviene de la raíz lingüística zamuco.
Etnológicamente los ayoreos pertenecen a la familia zamuco del Parapetí, raíz lingüística aislada del guaraní. El presidente de la Central Ayoreo Nativa del Oriente Boliviano, Suby Picanerai, afirma que su lengua es hablada por todos los miembros de su etnia, la cual es enseñada en casas y escuelas. El antropólogo Wigberto Rivero Pinto dice que ellos conservan el monolingüismo.
Una característica de la lengua de esta nación indígena es la ausencia/presencia de la R en los grupos de Bolivia y Paraguay; empero, se ha determinado que la pronunciación de esta letra es la original. Su abecedario tiene 20 caracteres: a, b, c, ch, d, e, g, i, j, m, n, jn, ñ, o, p, q, r, s, t, y. Y como subraya el antropólogo Jürgen Riester, el zamuco es "una lengua viva que más bien no está por desaparecer porque lo hablan los del campo y la ciudad".
Tradiciones Y Leyendas
Tradición:
Los ayoreos creen en el sol, la luna y las estrellas tienen sus caminos en el cielo. En la mañana el sol atraviesa gatájnoque gateí por el oriente, y lo abandona por la tarde en el occidente. Allí es transportado por las ondulaciones del yote quedéjname, un rio subterráneo, hasta que vuelve a aparecer en el este.
Si de noche en la tierra, en jnaropié es de día, si es de día en la tierra la luna alumbra en jnaropié.
En un intento de explicar su mundo, los ayoreos separan la historia en dos partes diferentes, consideran que antes todas las cosas los seres vivos eran hombres (los antepasados jhanibajade), pero con el transcurso del tiempo, se transformaron en las cosas y seres que hoy son, (era de los ayoréode disi ejodé, hombres de la nueva generación) ya sea por voluntad, como castigo o por haber sido muerto por otro.
Cuentan que los momentos de peligro, sequias y tempestades, son anunciados por unos pájaros llamados asojna. Para afrontarlos, además de prácticas rituales, deben narrarse mitos que son como formulas mágicas (ujñarone). En los mitos relatan momentos de peligro pasados y como fueron superados; la efectividad del relato en casos de enfermedades reside no solo en su contenido, sino principalmente en la respiración expulsada al hablar, que aumenta mas soplando en la dirección donde se encuentra el peligro. Estos relatos ujñarones, se aplican para curar enfermedades y heridas, aunque se pueden usar también para causar daño o matar.
Cuando los ayoreos permiten integrarse a algún extraño y aceptar los usos de otra cultura, (los totobiegosodes) realizan una ceremonia que consiste en pintarse el rostro de color rojo y negro, también se cortan el cabello y comienzan a emitir una especie de quejidos o ayes en vos baja.



Leyenda: Una conocido leyenda ayoreo que emerge de las tradiciones del pueblo originario. Una de ellas es justamente la relacionada a las formas de atraer la lluvia para regar sus sembradíos.
Según el cuento y cuando los seres no habían decidido ser animales o humanos, la Abuela Grillo –encarnada por Mariel Camacho- era la responsable de proveer el líquido elemento, razón por la cuál es permanentemente recordada por el pueblo ayoreo.
"Lo interesante, es que esta historia es relatada por "Atoj el zorro" emblemático personaje de la mitología andina que generalmente aparece en los cuentos infantiles", señaló, uno de los responsables.
De esta manera, fusiona íconos amazónicos y andinos también como una forma de reencontrarnos en nuestra diversidad cultural.

Tradiciones Y Festividades.-
Tradicionalmente los ayoreo, poseían una amplia mitología y fiestas religiosas propias, relacionadas con sus creencias en determinadas aves como divinidades tutelares; su cósmica se desplazaba en una constelación compleja y altamente estructurada de sistemas simbólicos, cultura ideológica que contrastaba con la escasez de material en la que vivían y el estado de nomadismo tribal. Se tenía el chamanismo como fuerza centralizadora del clan, paralelo al papel del decasuté; ahora ello ya no existe y es el Cristianismo el que se ha impuesto.
Religiosidad:
Tradicionalmente los ayoreo, poseían una amplia mitología y fiestas religiosas propias, relacionadas con sus creencias en determinadas aves como divinidades tutelares; su cósmica se desplazaba en una constelación compleja y altamente estructurada de sistemas simbólicos, cultura ideológica que contrastaba con la escasez de material en la que vivían y el estado de nomadismo tribal. Se tenía el chamanismo como fuerza centralizadora del clan, paralelo al papel del decasuté; ahora ello ya no existe y es el Cristianismo el que se ha impuesto.
Creencias sobre la muerte:

Todos los pueblos amazónicos creen en la inmortalidad de alma, conciben que al morir una persona su alma deambula por la selva durante mucho tiempo, después se va a vivir a un lugar imaginario donde dicen se encuentra la tierra sin mal. En este lugar no hay jefes, todos son iguales y hacen lo que les place, aseguran también que en el lugar destinado a los muertos no viven los blancos.
La escatología amazónica pese a la presión e influencia católica ha logrado sobrevivir, refugiándose en simbologías cristianas, como se dio en el Beni con el movimiento mesiánico de búsqueda de la "tierra sin mal", que durante siglos y hasta hoy sigue movilizando a los indígenas moxeños, movimas y yuracaré que esperan encontrarla representada en una "loma santa".
La concepción originaria establece que existe dos tipos de almas o espíritus, las buenas y las malas; los espíritus malos permanecen por mayor tiempo peregrinando en la selva, y en oportunidades se encarnan en animales y plantas. Los espiritus buenos van directamente a un lugar de placer y abundancia (tierra sin mal).
Dada las pautas sobre las creencias después de la muerte, es reconocible en las culturas amazónicas la práctica de una ética encomiable; respetan la vida, practican la justicia y valoran la solidaridad.

Concepciones religiosas

En la religiosidad indígena se tiene la idea de que existen seres o divinidades benignas, que ayudan y protegen y malignas que atacan y engañan a los hombres de distintas maneras. Estos últimos seres sobrenaturales están para castigar a las personas que violan las reglas de la comunidad, como las leyes culturales y los tabúes de reproducción.
En la actualidad son pocos los grupos indígenas que practican la religión tradicional de carácter telúrica y natural, pues la mayoría han sido influidas por el catolicismo o el evangelismo protestante, que han cambiado sistemáticamente la faceta espiritual de las culturas amazónicas, dejándoles inmersos en un complejo sistema de valores desconocidos y contradictorios a su ética comunitaria.

Mitología
La mitología amazónica tiene superabundancia de relatos elaborados para explicar y justificar la existencia de todos los entes naturales y supranaturales. El sentido simbólico del mito adquiere importancia profunda en la organización y religión de los indígenas, puesto que cada hecho y cada situación particular son desarrolladas a partir de la abstracción de una realidad.
Los mitos indígenas expresan simbólicamente situaciones críticas para el pueblo o recordatorios destinados a garantizar su existencia cultural. Por ello los mitos pueden ser educativos, que ayudan a que los miembros de un grupo se preparen para afrontar adversidades, o regulatorio si enseñan a que se cumplan las normas tradicionales. En la Amazonía la representación simbólica articula el conjunto de las actividades sociales, culturales y económicas.
Mito de la creación de la gente:

Con la sombra de Dupade se hicieron los Ayoreo. Voy a hacerlo con mi misma sombra, dijo Dupade. Dupade creó la persona hombre con la boca abierta y sin espíritu. Salía todo por la boca y el ano. Entremezcló su interior con aire y le dio la vida. Otro día hizo otra persona. Era muy frágil y era mujer: ordenó al hombre que tuviera sexo con ella. Pero no daba gusto. Entonces echó ají y sal y el sexo daba gusto. Su vientre se hinchó mucho. Y le preguntaron a Dupade qué era. Es un hijo dijo Dupade, no hay que tener miedo. Pero ellos al ver la cintura quedaron atemorizados.
Ciclo Vital:
Embarazo y Parto

En la mayoría de los indígenas amazónicos se desconoce la relación que tiene la menstruación con el embarazo, se dan cuenta que la mujer espera un niño tocándose el estómago o cuando empiezan los primeros movimientos del pequeño. A partir de este momento existen alimentos prohibidos tanto para la mujer como para el esposo.
El alumbramiento tiene lugar en la casa o en algún claro del bosque, generalmente son las mujeres ancianas que ayudan en el parto, pero el marido u otro familiar también pueden hacerlo. Es costumbre en las comunidades amazónicas que todas las personas, incluidos los niños puedan presenciar el parto; después del nacimiento toda la población se reune para festejar la venida de un nuevo ser.
Pasado el nacimiento, la madre y el padre se prohiben comer animales y aves macho, hasta bastante tiempo después que el niño camine y pueda hablar. Esta práctica de cutipa (cuvada) es cumplidad rigurosamente por todos los miembros de la cultura, pues conciben que su infracción implica castigo sobrenatural.
Originalmente en los pueblos amazónicos cuando una mujer muere durante el parto, aunque el niño esté vivo lo entierran junto con ella. Es también costumbre muy generalizada en muchos grupos, que si nacen mellizos no se permita vivir a uno de los dos. Los hombre prefieren que el primer hijo sea varón, pues se convierte en un compañero y ayuda.
Es probable que el aborto sea considerado delito grave en muchas culturas amazónicas; si un bebé muere dentro del vientre se culpa a la madre, los de la aldea la miran mal y de manera acusadora y el esposo puede incluso separarse de ella. Seguido al nacimiento se le da el nombre a la criatura; normalmente escogen nombres provenientes de sus antepasados o de familias adultos, pero también es común en la Amazonía el poner nombres relacionados con animales o fenómenos naturales.
Ritos de Iniciación

En las culturas amazónicas se pueden observar ritos de iniciación a la entrada de la pubertad. Cuando el indígena tiene alrededor de doce años es iniciado a través de ritos de carácter social y religioso. Estas celebraciones son seguidas de perforaciones del septo nasal, el rapado de la cabeza, de la circunscripción, del uso de armas y herramientas y de otros hechos que tienen relación con la sobrevivencia física y cultural del grupo. Pasado los ritos, los jóvenes adquieren su mayoría de edad y pueden buscar pareja para el matrimonio, así como ejercer derechos de adultos.
El rito destinado a las mujeres no se diferencia en mucho a los del varón, pero es una constante que esté relacionado con el inicio del primer periodo menstruo. Cuando sucede ello es normal que la niña sea aislada de las demás personas, incluso de sus familiares, permaneciendo ya sea en un lugar especial o en una hamaca muy común en las culturas amazónicas. Se le quita los adornos comunes y el cabello se le corta al ras; ella está prohibida de comer alimentos con sangre, como carnes de animales y de ciertas aves. El alimento que pueden consumir las niñas es preparado especialmente por sus madres y los cuidados se prolongan por varios días. Estos hechos otorgan la madurez sexual.
Matrimonio:

Por la diversidad cultural existernte en la Amazonía boliviana, las formas de matrimonio son muchas y cada una con caracterísiticas muy diferentes. Es una constante sin embargo, que el matrimonio esté íntimamente relacionado con expresiones de alianza entre familias extensas, que garantizan la reproducción de la vida y la cultura. Es muy común la práctica del matrimonio poligínico, donde la familia la constituye un hombre con dos o más mujeres, que a la vez atienden a sus respectivos hijos. Se conocen casos también en algunos grupos indígenas donde se presenta al matrimonio políginico sororal, de un hombre con dos o tres hermanas destinado a equilibrar las relaciones entre las co-esposas y sus hijos que además de ser hermanos son primos.
Las prácticas originarias de matrimonio debido al proceso de cristianización que se remonta a la época de las reducciones jesuíticas, han sido progresivamente sustituidas y alteradas por los ritos cristianos y occidentales. Por ejemplo, el matrimonio entre moxeños y chiquitanos es realizado de acuerdo al canon de la iglesia católica por un sacerdote, diácono o incluso doctrinero del Cabildo Indigenal.
Existen muchas prácticas curiosas en la Amazonía, una de ellas es cuando un hombre quiere a una mujer independiente, viuda o solterona para su esposa, lo único que hace es ofrecerle carne fresca para que se la cocine, si ella acepta prepararle los alimentos, automáticamente lo acepta también como esposo. Otras prácticas de unión matrimonial están relacionadas con el rapto de la mujer o formas de exogamia interclánica, que regulan el flujo de mujeres en función a sistemas de alianzas políticas y económicas.En la institución del matrimonio también existen preferencias entre primos cruzados o primos paralelos; en los primero un hombre puede casarse con la hija de la hermana de su padre, o con la hija del hermano de su madre. En lo segundo puede hacerlo con la hija de la hermana de su madre o con la hija del hermano de su padre. En la tradición amazónica la poliginia está permitida y es hasta hoy practicada. Sin embargo, lo más común es que el hombre tenga mas afecto a la primera esposa que es la encargada de la distribución de los alimentos y administrar la casa. El indígena y sus esposas viven en una misma casa; las mujeres con sus respectivos hijos se ubican en rincones opuestos, el marido tiene su cama o hamaca al centro.
No es frecuente las relaciones extra-matrimoniales, las personas que incurren en este hecho son mal vistas por la comunidad, por considerarse alteración al orden natural de la cultura, que incluso permite la poligamia a los hombres. El divorcio (separación de hecho) es practicado solamente por razones extremas; si el hombre tiene problemas con alguna esposa –por que no le da hijos o es floja- éste la abandona; los niños menores de seis años quedan con la madre, la abuela materna o paterna.

Muerte y Sepelio:

La muerte es considerada como una parte del ciclo de existencia, que no es solo terrenal; ellos nunca suelen hablar de ella y solo hacen referencia cuando guarda relación con hechos heroicos. En muchas culturas (que mantienen la tradición) cuando muere una persona, todos los familiares comienzan a llorar y a gritar fuertemente, esto sirve como aviso a los demás miembros de la comunidad, que muy pronto rodean al difunto y convierten el dolor en un llanto general.
Las prácticas de entierro son diversas, unas culturas entierran a sus muertos liados en corteza de árbol, otras queman el cadáver y las cenizas en el aire y se han conocido también formas de endocanibalismo (comer carne humana con fines rituales y religiosos). Es muy generalizado que las pertenencias principales del difunto, como armas, hamaca, adornos y incluso mascotas sean destruidas o enterradas con él.
                       CONCEPCION SOBRE EL ORIGEN DEL COSMOS
La representación que los Ayoreos tienen del universo, esta consolidad por la comunicación de los chamanes, cuyas orégatedie (almas) son las únicas que pueden penetrar en esas regiones. De esta forma la construcción del mundo difiere en particularidades, pero se notan rasgos fundamentales comunes que corresponden a las representaciones de todos ellos.
Los Ayoreos se imaginan a la tierra en forma plana, según su cosmovisión, sobre ella se levantan dos o cuatro capas de la bóveda celestial. La capa inferior más cercana a la tierra, la denominan gatájnoque ó érape tejnui, esta zona esta cubierta de grandes bosques donde también viven animales, pero en proporciones mayores que en la tierra.
Le sigue la llamada capa érape uñai, allí hay playas de arenas y rocas en las que habitan las nubes y donde se origina la lluvia, según su cosmovisión. En este lugar del cielo también viven los animales que aparecen en grandes cantidades poco tiempo después de las lluvias (aves acuáticas, sapos, ranas y mosquitos). La capa superior de cielo es gatajnoque gatei. Allí se encuentran el sol, la luna y las estrellas.






3 comentarios:

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  2. Su creencia de los ayoreos sobre la muerte es que al morir una persona su alma deambula por la selva durante mucho tiempo.tambien dicen que en la tierra sin mal no están los blancos,y establecen que existen dos tipos de almas la buenas y las malas,los espíritus malos permanecen en la selva por mucho tiempo y los espíritus buenos van directamente a un lugar de placer.

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